“Renovarse o morir” es una afirmación que, aunque contundente, puede no funcionar a la hora de decidir renovar tu página web, pero puede que estas razones sí te ayuden a animarte a ello. En ocasiones nos encontramos con clientes dispuestos a invertir en acciones y campañas online que de poco les pueden servir si no actualizan su web. Sabemos que es una inversión, pero los beneficios que se pueden obtener son superiores. A fin de cuentas, es nuestra carta de presentación en Internet, cada vez más presente en nuestras vidas.
“Renovarse o morir” es una afirmación que, aunque contundente, puede no funcionar a la hora de decidir renovar tu página web, pero puede que estas razones sí te ayuden a animarte a ello. En ocasiones nos encontramos con clientes dispuestos a invertir en acciones y campañas online que de poco les pueden servir si no actualizan su web. Sabemos que es una inversión, pero los beneficios que se pueden obtener son superiores. A fin de cuentas, es nuestra carta de presentación en Internet, cada vez más presente en nuestras vidas.
¿Por qué renovar tu página web? Elementos obsoletos.
Si lo piensas verás que el mundo ha cambiado desde que hiciste tu web. Hace unos añitos se diseñaba solo para pantalla de ordenador pero, hoy en día, raro es no consultar desde nuestro móvil o Tablet páginas que nos interesan. Si tu web no se adapta a estos dispositivos seguramente perderás visitas y clientes potenciales, ¡es el momento de hacerse responsive!
No queremos ponerte triste, pero Flash ha muerto. Si quieres que tus usuarios no tengan ningún problema con tu web, hay que evolucionar ya y dejar atrás esas animaciones obsoletas. Además, por arte de magia verás como este simple cambio mejora tu posicionamiento. Hace ya mucho tiempo que Google no ama a flash, así que puede que hayas notado un descenso en tus visitas pero, poco a poco, podrás volver a ganarte su cariño.
La imagen de marca. La importancia de no parecer de otro siglo.
La moda no solo afecta a nuestra ropa o a la decoración de nuestra casa, también a nuestra web, que a fin de cuentas es nuestra casa virtual. Seguro que cuando entras en casa de la abuela piensas “cambiaría esto, aquello, la tele es pequeña, modernizaría la cocina…” pues con muchas páginas web pasa lo mismo. Y no hablamos solo de estética, cambiar dos fotos o apartar unos tapetillos, también de funcionalidad. La experiencia de usuario es cada vez más importante. Ya no decoramos igual que nuestra abuela y no navegamos por internet igual que hace unos años.
La organización es imprescindible. Nuestros visitantes deben encontrar lo que buscan rápidamente, por ello es primordial que nuestro contenido esté bien organizado. Volvemos a la base, la experiencia de usuario: si encuentro lo que busco a la primera tendré una experiencia satisfactoria, pero si tengo que estar diez minutos buscando… seguramente desistiré al tercer click.
El Seo y otros demonios, ¿por qué nadie encuentra mi página web?
El posicionamiento. Muchas veces pensamos que con tener una web nos basta para estar presentes en Internet pero, ¿de qué sirve tener una web si nadie sabe que la tienes? Es importante que nuestra página esté bien posicionada de manera natural, mediante las palabras clave adecuadas. Si tu web tiene muchos años puede que las acciones que realizaste en su momento tampoco sirvan de mucho pues los motores de búsqueda cambian constantemente y lo que era básico para obtener un buen SEO, hoy puede no servir de mucho. Piensa que el algoritmo de Google cambia constantemente.
¿Qué debo incluir en mi renovación web? Un blog para dominarlos a todos.
El contenido es el rey en Internet y sobre todo para Google, que adora las web actualizadas y que aporten valor a sus usuarios. Si tu web es una página estática, probablemente caiga en el olvido de los últimos resultados de búsqueda muy pronto pues Google puede considerar que ha sido abandonada y por ello, considerarla no relevante.
¿Qué te puede ayudar? Un buen blog. Si el robot del buscador ve que, cada cierto tiempo, encuentra en tu web nuevos contenidos, encontrará un motivo para volver a ella. Eso sí, como decíamos, el contenido debe ser de calidad y relevante para tus usuarios. ¡No sirve cualquier cosa! Cuanto mejor sea tu contenido, más atraerá a los visitantes y esto te dará cierta autoridad de cara a Google. Esto hará que te posicionará mejor.
¿Cómo mejorar la autoridad de mi web sin morir en el intento? Pues generando enlaces. Digamos que Google considera que si mucha gente habla de ti es porque eres importante. Si tienes un buen blog que gusta a tus visitantes y estos comparten tus contenidos, ya tienes un medio cielo de autoridad ganado. Si consigues que otras páginas de calidad te enlacen, ya tienes la otra mitad 🙂
Difunde tus contenidos en redes sociales, no te cortes. Lo más probable es que, si tu web tiene unos cuantos años, sea una web bastante estática y sin ningún tipo de unión con tus Redes Sociales. La posibilidad de adaptar los contenidos de tu web, cambiarlos según campañas específicas y difundirlos en las distintas redes hará que crees enlaces y, con ello, mejores tu posicionamiento. De ahí a ganar visitas y con esto mejorar tus ventas hay un paso, ¿verdad?.
Dicen que una web debería revisar estos parámetros cada 4 o 5 años para no quedarse obsoleta, así que, después de leer estas razones piensa ¿debes renovar tu web? Si aún tienes dudas recuerda que estamos para ayudar y, si ya lo tienes claro, ¡también!